La estela de luz de el bicententenario es un ejemplo claro de cómo los
políticos nos están desfalcando en México y nos van a llevar a la ruina.
Se trataba de construir un monumento representativo para conmemorar los
200 años de el nacimiento de México por lo que se planeo construir una estela
de luces como ha 100 años se construyó el ángel de la independencia.
Debería haber quedado terminada para el 16 de septiembre de 2010 y
contar con un parque de 3.5 hectáreas que nunca se construyó.
El arquitecto que ganó el concurso entre 34
despachos, César Pérez Becerril, asegura que el diseño que fue elegido por el
jurado no se respetó y lo que se ve actualmente es un resultado “mutilado” en
el que se utilizaron materiales de menor calidad.
“La obsidiana dura para toda la vida; la gente podría reflejarse en ella,
además es un material de origen mexicano y representaba parte del inframundo y
en el grabado cualquier persona ya sea de origen maya o huichol o cualquiera
que existe en el país podría leer en su lengua este mensaje. Lo que hicieron
con esa tablarroca da más la imagen de un antro de un mal gusto”, indica Pérez
Becerril en entrevista con La Razón.
Costó 3 veces más y quedó 10 veces
más chica que el proyecto original
Se retrasó 15 meses su construcción.
Al final tuvo un costo total de más
de 14 veces el gasto anual de la Cruz Roja Mexicana.
El costo total estaba presupuestado
en 393 millones de pesos
La auditoría superior de la
federación detectó fraudes de mas de 400 millones de pesos
El proyecto planteaba construir un
parque de 3.5 hectáreas que ya no se construyó
El proyecto inaugurado apenas abarca
el 13% de tamaño de el proyecto original
Se entregó con 10 meses de retraso
El costo total fue de mil 176
millones de pesos
El evento para su inauguración costó
4 millones de pesos
El proyecto resultante es una construcción que podemos ver y tocar pero
si comparamos esto con los miles de proyectos sociales que se encuentran en
manos de políticos corruptos nos damos una idea como la incompetencia,
ineficiencia, corrupción y nepotismo están sangrando al país.
Me imagino cuantas miles de estelas de luz hay por todo el país en forma
de hospitales, carreteras, escuelas y obra pública.
Propongo aqui que sea cambiado el nombre de la estela de luz a "Monumento a la corrupción"
Fuentes
Revista PROCESO http://www.proceso.com.mx/?p=294533